Existen multitud de herramientas on-line de valoración de fincas (especialmente de viviendas): BBVA Valora, Bankia, Tudomus, Tinsa, etc. Y sus resultados difieren en algunos (pocos o muchos) miles de euros. Porque las valoraciones dependen. Dependen de muchos factores, que incluyen la decoración interna, su estructura (de madera, quizás), la orientación de la vivienda, los derechos de vado en locales o la zona socio-económica de su entorno. Así que las valoraciones son difíciles, como también lo son las tasaciones: porque si se paga más por una tasación es porque se desea utilizar como elemento pivotante para vender, comprar o financiar una finca. Y aquí también se dan variaciones entre tasadores, de forma que un tasador no le servirá a un cierto banco, que exigirá su propia tasación para la financiación de la finca.
¿Cuál es el verdadero valor de una tasación o valoración, formal o informal, de una finca? Pues… ¡Su eficacia en la gestión de su compraventa? Sin duda. Sin ninguna duda. Así que se dan valoraciones correctas (según el mercado), razonables (según los propietarios), profesionales (según el tasador)… y eficaces (según el comprador).
La diferencia entre el valor de oferta/salida de una finca y su valor de escritura (en el caso plausible de que se perfeccione la compraventa)… depende de la zona. Porque en Euskadi no ocurre lo mismo que en Madrid, y la diferencia de precios es, simplemente, distinta. El objetivo de una valoración, desde el punto de vista de mariatomasa.com, es conseguir un pivote de oferta al que acompañar las características visibles (y no tan visibles) del inmueble, de forma que, sin salir del rango de precios del vendedor, satisfaga los rangos de precios de los compradores. Nuestra base de datos actual (la de mariatomasa.com) consta de más de 13.000 potenciales compradores que ya se han dirigido a nuestra empresa y que todavía no han comprado. Así que se trata de convergencia, de sinergia… de eficacia, al fin.
Cuando nos preguntan por tasaciones de pago nuestra costumbre es repreguntar por el motivo: auto-seguridad, garantía ante terceros, intervenciones judiciales, conflictos de valoración, etc. Porque a veces es necesaria la certificación de un precio. Porque a veces esta certificación ayuda en situaciones de indefinición. Porque, a veces, es lo que hay que hacer. Pero… ¿cómo valorar cada situación? Pues mediante una sencilla consulta a nuestros departamentos comercial y jurídico… de la que se encargará nuestro agente comercial, SU agente, el de su zona, el de su finca.